lunes, 5 de septiembre de 2011

All at once.


Cuando cierras tus ojos para dormir, muchas veces acabas creándote una historia, algo que adorarías que ocurriese, pero que en el fondo, sabes que es imposible. He aprendido que no hay cosas imposibles, sólo improbables. Era muy improbable que yo conociese a Vicky Jones, y lo hice. Era muy improbable tener una foto con Jack Barakat, y la tengo. Era muy improbable ver a My Chemical Romance en concierto, ¡y les vi y fue el mejor día de mis dieciséis años! ¿Veis a lo que me refiero?

El ser humano es un ser soñador por naturaleza, sueñas tus metas, sueñas todo lo que quieres conseguir alguna vez en tu vida. Pero, ¿por qué sólo ibas a soñarlo? Si quieres, si te esfuerzas, lo acabas consiguiendo. Los sueños existen por una razón, para ser cumplidos. Y nunca, nunca van a cumplirse por si solos, tienes que moverte, tienes que luchar.

Los sueños son como un partido de fútbol, por ejemplo.

Es decir, el balón son todos tus sueños, acumulados, todo lo que quieres de verdad, todo lo que consigue que te levantes cada mañana y sigas día tras día. El equipo contrario, el que juega contra ti, son todos los obstáculos que vas a tener que superar antes de marcar el gol, antes de conseguir que tu sueño se haga realidad. Y caerás, ya lo verás, caerás y te llenarás de barro, te harás heridas, llorará, dolerá y te convencerás de que eso nunca va a ser verdad, ¿pero sabes qué? Se hará realidad si sigues luchando. Levántate, enfréntate a cada uno de esos obstáculos, a cada uno de esos jugadores del equipo contrario que van a intentar derribarte, esos con los que no crees poder. Y en realidad, sólo tienes que regatearles, agarrar tu balón, tus sueños, como si la vida te fuese en ello.

Entonces, llegará un momento en el que estés en el área enemiga, en frente de una gran portería, una inmensa portería que a tu parecer, será pequeña, muy pequeña, y las oportunidades de que el balón golpee la red, te parecerán imposibles, inexistentes, pero nunca es así. No hay nada imposible. Cuando pasas la palabra “imposible” a ingles, la propia palabra dice que es posible “i’m posibble”. ¿Veis a lo que me refiero?

Mucha gente, a lo largo de tu vida, va a decirte que no puedes hacerlo, que no vas a conseguirlo, que es una pérdida de tiempo. Me encantaría que mirases a esa persona a los ojos y cuando te diga que no podrás hacerlo, respóndele: “Mírame”, y lánzate a por ello sólo si consideras que merece la pena hacerlo, si consideras que eso va a hacerte feliz, porque eso es en lo que consisten los sueños. En hacernos felices y en recordarnos que no todo es tan negro como la gente suele pintarlo.

Y sí, es ridículo que yo os diga esto, ¿pero qué esperabais? Siempre he sido realista, quizá más negativa que positiva, pero siempre he visto las cosas como son. También es cierto que los negativos tienen mucho mejor todo. Es decir, si te haces a la idea de que todo saldrá mal, si sale mal, no te dolerá, y si sale bien, una sorpresa que te llevas. ¿No? Siempre dicen que ser negativo es malo, yo me planteo que quizá no lo sea tanto.

Como decía antes, caerás, tropezarás y te llenarás de barro. Llorarás, escondido en cualquier rincón, abrazándote las rodillas, bajo las sábanas de tu cama. Llorarás porque sientes que te has fallado a ti mismo, y si no lo sientes ahora, lo sentirás cuando veas tus sueños romperse lentamente delante de ti, porque lamentablemente, has caído. Pero eso no significa el fin, ¡claro que no! ¡Oh Merlín! ¿Por qué ibas a quedarte tirado en el barro como si tu vida ya no tuviese significado? ¡Levántate y sigue! El camino está lleno de baches, piedras, y vas a caer, una vez tras otra, tendrás que escalar muros, tendrás que permanecer en el suelo, intentando recuperar el aliento. Pero, NUNCA, NUNCA te rindas. Porque ese es el paso definitivo para que tus sueños acaben desapareciendo en la oscuridad.

Simplemente confía en ti, agarra tu balón, a todos esos sueños que tanto significan para ti, y sigue luchando, golpea, araña, muerde, pero nunca, nunca dejes que nada ni nadie te acabe tirando al suelo. No les dejes alcanzarte, sigues teniéndote a ti, nunca vas a fallarte a ti mismo si confías en ti.

Si eres sincero contigo mismo, nunca podrás estar equivocado.

Y si necesitas que alguien crea en ti, para que tú empieces a creer en ti mismo…

Yo voy a creer en ti.


Sometimes,

the hardest thing and the right thing

are the same.

domingo, 4 de septiembre de 2011

Don't let me go.


Reconozco que hay días en los que me siento totalmente perdida y siento que nada, absolutamente nada sale bien. Esos son los días en los que de verdad desearía desaparecer del mundo, o al menos, encontrar un modo de hacer las cosas correctamente y no cometer fallos cada dos por tres. Esos son los días en los que me siento totalmente impotente y necesito a alguien que me asegure que todo va a estar bien. Lo peor de todo, es que sé, que no me sirve cualquier persona.


Me encantaría recibir una llamada que me dijese: “Pequeña, todo saldrá bien”. De verdad, me encantaría tener una llamada así, a todas horas, recordándome que está conmigo. Y lo cierto es que no lo está, y que yo no tengo esas llamadas. ¿Y qué le vamos a hacer? No podemos controlar que ocurre, no podemos hacer que todo sea como a nosotros nos dé la real gana, pero sí que podemos intentar que todo esté bien, con nuestras acciones, podemos cambiar algo. Y es que si tú no lo haces, ¿quién demonios va a hacerlo por ti?


Lo he estado pensando mucho, de verdad que sí, y siempre acabo llegando a la misma conclusión. No soy fuerte, no voy a serlo nunca, y lamentablemente ¿cómo diablos puedo llegar a cambiar eso? ¿Acaso hay una poción mágica que me convierta en alguien invulnerable ante el resto del mundo? ¿Acaso puedo controlar mis propios sentimientos? ¿Hay algún botón que me permita desconectar mis emociones? Pero la única verdad aquí, es que no lo hay.


Es cierto que he pasado por muchas cosas, cosas que quizá nunca te imaginarías, y he perdido todo lo que me enseñaron. He dejado de confiar en la gente, he dejado de confiar en todo el mundo, y sólo confío en gente que me demuestra que estará ahí siempre, y que a pesar de mis errores, podré contar con ellos y sabrán perdonarme. También, a través de todos los baches con los que he tropezado, todas las piedras, las paredes, todos los fallos cometidos, he aprendido que al final, todos, absolutamente todos, acabamos solos.


Muchas veces, acabo sintiéndome perdida, como si realmente no tuviese un lugar. Perdida, entre un montón de gente pero aún así, sintiéndome completamente sola, y no puedo evitar pensar que lamentablemente, al final, estaré completamente sola.No todo va a estar bien, lo sé. Nunca va a estar todo bien, porque el mundo no está hecho para eso, el ser humano no está hecho para convivir en paz consigo mismo.

¿Qué cómo lo sé? Es muy simple. El ser humano es la especie aniquiladora, la especie más asesina, la más violenta. El ser humano es la especie más peligrosa que hemos conocido hasta ahora. Somos vengativos, violentos, rencorosos, escépticos, y desconfiados por naturaleza. Y lo más básico de todo, necesitamos amor.

¿Qué demonios es el amor? ¿Tan fuerte es? Es una moneda. El amor es una moneda porque definitivamente, tiene dos caras. Puede ser bueno, porque quizá es mutuo, o, puede ser malo porque no eres correspondido. Según la RAE, el amor es un sentimiento intenso del ser humano, que partiendo de su propia insuficiencia, necesita y busca el encuentro y la unión con otro ser.

Quizá leído no os parezca tan importante, y debo deciros que me encantaría explicaros qué demonios es el amor. Pero no puedo. No puedo hacerlo porque no sé qué es el amor, no sé qué se siente al estar enamorada. Y he visto a gente sufrir, he visto a mucha más gente sufrir por culpa del amor que ser felices por ese sentimiento.


Quizá viniendo de una cría como yo, no tenga mucho sentido que os diga que para mí, el amor no significaría encontrar a la persona con la que puedes pasar el resto de tu vida. Para mí, el amor significaría encontrar a la persona sin la que no podrías vivir. Si encontráis a esa persona, mantenedla cerca si es correspondido. Si no lo es, alejaos antes de que sea demasiado tarde.


Ps. Deberiaís escuchar a The Fray.

Why you have to wait? Where were you? Where were you? Just a little late, you found me.