sábado, 6 de agosto de 2011

Only place I call home.


Me gustaría decir que no estoy sola, que soy feliz, que sonrío por ello. Me gustaría decir que la vida me ha dado mucho, que me está gustando mi vida, mis dieciséis años. Me gustaría decir que he cumplido todos mis sueños, que estoy realmente orgullosa de mí misma, y que soy buena, realmente buena en lo que quiero.

Me gustaría decirte todo eso más, conseguir que esa idea que tienes de mí, de que valgo algo, de que soy buena, agradable, simpática, de que soy alguien en este mundo, sea real.

Pero es que no puedo, no me sale. Y es que me están demostrando poco a poco que yo para ellos no valgo nada, que ni si quiera saben que existo, que siempre la mala de la historia soy yo y eso es porque soy más débil, y todo esto, lo de ser más débil que ellos, no tener autoestima, haber estado deprimida, llorar para caer rendida en la cama, fingir una sonrisa... Todo eso, es por su culpa, porque quizá de verdad, quizá para ellos todo lo que sucedió fueron simples bromas y no se daban cuenta de que dolía, porque dolía de verdad.

No se daban cuenta de al extremo al que podían llevar a una persona que se sentía humillada, usada, que pensaba que no valía una mierda, y que se sentía completamente sola en el mundo. ¿Por qué? Porque ellos consiguieron que yo me sintiese así, confundida, sola, perdida, asustada... ¡Por dios, si tenía miedo de ir al colegio! ¿No lo vieron? Cuando fingía estar enferma para que mi madre fuese a buscarme, cuando me escapaba del colegio y me tocaba quedarme a comedor. Huía de ellos, porque les tenía miedo, porque sabía que ellos tenían a toda la clase para apoyarles cuando se metiesen conmigo, veinticuatro contra una sola persona, una niña pequeña, asustada, confusa... Una niña que había confiado en ellos.

Ahora podemos pensar que es normal, ¿no? Pero es que no lo es, no es normal que una persona viva asustada, huya de los sitios en los que debería estar. No es normal que una persona llore para dormir sin pesadillas, no es normal que una persona caiga en depresión por culpa de unos imbéciles y tampoco es normal que alguien deje de comer por el típico "estás como una foca".
Y ellos deberían saber mejor que nadie, porque la música es mi vida.

Porque la música estuvo ahí cuando todos ellos me dejaron de lado, se metieron conmigo, me hundieron la vida. La música estuvo, está y estará cuando ellos se cansen de jugar conmigo y decidan volver a clavar sus cuchillos en mi espalda.

Take all of your doubts
you can throw 'em all
you may be unsure
but I know.
I'm always coming back,
you can bet on that,
you're the only place I call home.