lunes, 26 de octubre de 2009

About nothing.


¿Ser sinceros?

Vamos, hay que ser capaces de ser sinceros, ¿verdad?

Siempre decimos eso, decir las cosas a la cara y no a las espaldas, pero dime, pequeño intento fracasado de saltamontes, ¿eres tú sincero o sincera, acaso? ¿No lo sabes?

Yo te diré que NO.

En este mundo no hay nadie que no haya mentido una sola vez en su vida, nadie que no se haya arrepentido de mentir, y nadie que no se haya sentido feliz al olvidarse de esa mentira.

Ahora bien, dime, ir chismorreando a las espaldas, criticando y luego por delante fingir ser buena amiga o amigo... ¿es ser sincero?Creo que coincidimos en eso, ¿cierto?

Pues entonces, ¿por qué las personas somos tan cabronas de hacer eso? ¿Odio, envidia?

Porque está muy claro que es lo que la mayoría hace, y lo que yo y otras tantas personas detestamos a más no poder.

Sinceridad, bonito nombre, ¿verdad?

Entonces, ¿por qué no ser leales, honestos, y respetar esa palabra?

Hay veces en que una mentira, salva un barco, pero otras, una mentira, hunde el barco, porque finalmente, se sabe la verdad...
Because when I arrive
I bring the fire.

No hay comentarios: